Tener una alimentación saludable que incluya frutas, verduras, pescados, lácteos descremados y cereales de preferencia integrales, previene las enfermedades del corazón y ayuda a controlar factores de riesgo y enfermedades asociadas como la diabetes, hipertensión arterial, dislipemias y obesidad.

En esa semana del corazón, como todos los días del año, la Asociación Médica recomienda incorporar verduras y frutas en todas las comidas, incluir pescado al menos una vez a la semana, disminuyendo el consumo de carnes procesadas como fiambres y embutidos. Disminuir la sal y el azúcar para cocinar.

Elegir alimentos naturales y evitar el consumo de productos ultraprocesados en el día a día, con excesiva cantidad de grasas, azúcar y sal.

Comenzar el día con un buen desayuno y no saltearse comidas. Preferir el agua a otras bebidas, limitar los refrescos, los jugos artificiales y las aguas saborizadas.

Utilizar aceite para las preparaciones en lugar de otras grasas, y evitar comprar productos con excesiva cantidad de grasas, especialmente las tans.

Las recomendaciones incluyen la realización de al menos dos horas y media de actividad física por semana, disminuyendo el tiempo de permanencia sentado.